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Si hay un acontecimiento en la existencia humana que pone a prueba su fortaleza espiriual y emocional es la pérdida de la salud. La condición humana se hace más evidente en la forma en cómo se reacciona frente a ésa adversidad, ya que confronta al paciente de forma directa consigo mismo y con personas con diferentes personalidades y formas de entender la vida.

 

En la era de la información la mejor fuente para resolver las dudas del paciente es y debe ser el médico.

EL PACIENTE Y SU ENFERMEDAD

EL PACIENTE Y SU SALUD

 

A pesar de la dificultad que puede representar una enfermedad crónica, el ser humano tiene la capacidad de decidir cómo la enfrentará.

 

¿Permitirá que otros decidan por él?

 

¿Se resignará a no hacer algo al respecto?

 

¿Buscará hacer los cambios necesarios para tener la mejor calidad de vida?

 

La búsqueda de la salud es una carrera de larga distancia no de velocidad. Por ello es conveniente prepararse para correrla en las mejores condiciones posibles y la clave es un trabajo en equipo con la familia, los amigos, grupos de apoyo, profesionales de la salud.

EL PACIENTE Y SU CUIDADOR

 

La enfermedad también puede generar situaciones de tensión entre los miembros de la familia, en especial cuando el padecimiento se encuentra en una etapa avanzada, provocando que no haya un consenso en la forma en cómo atenderlo y la manera de contribuir a los gastos.

 

Dividir y asignar las tareas, alternando el rol de cuidador principal es importante para poder dar así una adecuada atención a su paciente, lo que a su vez ayudará a un buen funcionamiento de la vida familiar.

ESTILO DE VIDA SALUDABLE

 

Parte importante de un tratamiento integral es el llevar un estilo de vida saludable, el cual consiste en hábitos y  conductas encaminadas a tener una buena calidad de vida: llevar una alimentación adecuada, dormir bien, actividad física moderada, actividades recreativas, higiene personal, la formación de redes sociales, no fumar, no consumir alcohol o drogas.

 

El sólo hecho de llevar un estilo de vida saludable tiene efectos benéficos en la salud en general y en particular del mismo hígado.

ADHERENCIA AL TRATAMIENTO

 

La adherencia hace referencia al cumplimiento por parte del paciente para tomar los medicamentos de acuerdo a las indicaciones del médico, tanto en las dosis y los tiempos marcados.

 

También implica un compromiso del paciente con su salud porque el no tomar sus medicamentos conforme a lo indicado, es decir, no llevar una adecuada adherencia, puede provocar una menor efectividad de los mismos y no tener los resultados esperados en la mejoría o cura del padecimiento.

COMORBILIDADES

 

Muchos pacientes experimentan uno o más enfermedades distintas que existen simultáneamente o comorbilidades, las cuales si no son atendidas en su conjunto pueden empeorar su condición de salud .

 

De allí la importancia de atenderlas de manera oportuna, con la finalidad de evitar en la medida de lo posible las complicaciones asociadas. Se requiere de un estudio más detallado del paciente para buscar evitar interacciones negativas entre los distintos medicamentos a recetarle.

RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE

 

La relación entre el médico y el paciente está pasando por un cambio, donde al primero se le pide tener una mayor empatía por el segundo, y que éste sea más responsable en cuanto al cuidado de su priopia salud.

 

Hay pacientes pasivos que delegan la responsabilidad al médico, otros son más cooperadores pero sin adquirir un compromiso firme con el cuidado de su salud, y otros son más participativos ya que buscan estar mejor informados acerca de su padecimiento y tener una relación más recíproca con el médico.

EL PACIENTE Y SU FAMILIA

 

La familia constituye la parte esencial para el manejo adecuado de la enfermedad. Es de suma imporancia que la familia también reciba información clara y precisa del padecimiento, el tratamiento y los cuidados a seguir.

 

Se reconoce que entre mayor sea la comunicación en la familia, mayor será el nivel de adaptación a la enfermedad. Cada integerante tiene derecho a su propia vida, por lo que establecer límites en los roles es primordial.

REDES DE APOYO

 

Parte importante para enfrentar del padecimiento es la formación de redes de apoyo. Una de estas redes son las amistades, ya que son una fuente valiosa de apoyo para manejar la angustia, la depresión y el tratamiento.

 

Otra red de suma importancia son los grupos de apoyo, ya que son el sitio donde se pueden encontrar a personas que están o han pasado por situaciones similares y en donde aprenden el papel crucial que tiene el conocimiento sobre su padecimiento y los cuidados a seguir. Son un reservorio de gran experiencia empírica.

 

Son una comunidad de personas que se ayudan mutuamente y se comprenden sin juzgar, en donde el paciente y su familia descubren que no están solos, que pueden hablar con confianza acerca de cómo se sienten  ... "lo que se dice en el grupo se queda en el grupo".

IMPORTANCIA DEL TRATAMIENTO INTEGRAL

 

Está demostrado que el paciente que recibe una atención integral, la cual incluye la parte médica, nutricional y emocional; se le facilita el proceso de adaptación y manejo de su padecimiento.

 

Terapia médica

 

Los especialistas a consultar son el hepatólogo, gastroenterólogo, internista e infectólogo. El médico no sólo se enfocará en una atención para el diagnóstico y tratamiento del padecimiento, sino también en las medidas preventivas (profilaxis) orientadas a mejorar el estado de salud general.

 

Terapia nutricia

 

El especialista es el nutricionista clínico (de preferencia en enfermedades del hígado). La nutrición es uno de los pilares de la salud y para un paciente hepático, en especial para el que ya tiene un daño crónico y avanzado, el llevar una adecuada alimentación personalizada es clave para reforzar el sistema inmune, lo que se traduce en un mejor estado de salud general.

 

Terapia emocional

 

El psiquiatra, el psicólogo, el tanatólogo son los especialistas a visitar. Una mala salud emocional puede debilitar aún más el sistema inmune de tal forma que la enfermedad acelere el daño, o bien, surjan nuevos síntomas.

 

El cuerpo tiene la capacidad de responder conforme a la manera en cómo la persona piensa, siente, y actúa. Las emociones pueden afectar la salud.

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